Don Otelo joven
El retrato como recurso en tantos movimientos artísticos clásicos ofrece la posibilidad de representar un producto tan tradicional con una perspectiva tan actual. El juego de un personaje como el gato, tan cercano al ser humano como animal de compañía, confirma un juego irónico que genera una imagen desenfadada, trabajada desde unos acabados clásicos.
Esta bodega, en su tercera generación, ha basado su experiencia en el poder que transmite una herencia de trabajo y esfuerzo por restaurar el valor de una región.
A través de sus vinos consigue exportar ese objetivo: poner en valor un producto tan autóctono y con tanto arraigo de la región de La Manchuela.